Pocos crecemos manteniendo las burbujas que nos protegían de niños, la mayoría las rompen, buscan deshacerse de ellas. En algún punto de la adolescencia las intentamos romper, algunos pueden y de ellos pocos las reconstruyen por que la protección, aunque aparente ayuda en la seguridad personal.
Yo tengo mi burbuja, mas bien, una vitrina que me protege, y si bien, la protección es mucha, existen muchas desventajas.
Al parecer ya me canse de luchar contra ella... es como la historia del elefante...
Erase una vez un elefantito, que cuando llegó al circo le pusieron un grillete, y el elefantito luchaba con todas sus fuerzas para zafarse del grillete, nunca pudo y cuando creció, siguió creyendo que no podía y se balanceaba contra el grillete con la fuerza de un elefantito sin darse cuenta del tamaño que tenía y de que ya ese grillete no lo podía contener...
Tengo que luchar contra mi burbuja. Contra mi vitrina... por que pocos pasan la vitrina y cuando lo hacen, muero de miedo de cuando vayan a salir... Tengo miedo de quedar expuesta y cada vez que alguien sale de la vitrina, la vitrina se vuelve mas dificil de traspasar... paso de un cristal normal a seguridad de joyería y gracias a eventos recientes parece que custodia el Number 5 de Jackson Pollock...
